Planteamiento de la izquierda revolucionaria

puno_alzado.jpg Por un instrumento político de los trabajadores

Las organizaciones de la Izquierda Revolucionaria hondureñas, que firmamos este pronunciamiento, luego de un análisis de la situación nacional previa y posterior al Golpe de Estado del 2009, nos dirigimos a la clase obrera, campesinos, pobladores y todos los sectores populares del país –en particular a la mujer y la juventud–, en los siguientes términos:

1. A partir del golpe de Estado de 2009 el aparato institucional y su Carta Constitucional, originados en la Asamblea Nacional Constituyente de enero de 1982, fueron quebrantados por los mismos partidos políticos y los sectores dominantes representados en ellos, imponiendo un régimen de facto, dictatorial y fraudulento, al servicio de la política del imperialismo norteamericano.

2. Como consecuencia de la continuidad del golpe de Estado de 2009, el gobierno surgido en las ilegítimas elecciones de noviembre de ese año, ha profundizado al extremo la militarización del país; el asesinato continuado de dirigentes campesinos, indígenas, estudiantiles, comunicadores, profesionales del derecho, procuradores de derechos humanos, en una macabra estrategia de limpieza social y política; acompañada de la represión generalizada e institucionalizada contra las organizaciones magisteriales, campesinas, comunidades que luchan por la defensa de sus territorios y por sus derechos; en el macro de la criminalización social.

3. Asimismo, se siguen asaltando todas las instituciones creadas por el mismo régimen democrático burgués producto de su desesperación por mantener el control político del Estado. La Corte Suprema de Justicia, la Fiscalía y los órganos judiciales; la policía y las fuerzas armadas, todas son manipuladas autoritariamente por los grupos de poder quienes se las disputan como botín para garantizar el enriquecimiento, la corrupción y la impunidad. Las leyes aprobadas tienen por objetivo “blindar” el régimen surgido con el golpe de estado ante cualquier intento de cambio.

4. El autoritarismo y la represión impuestos a nuestro pueblo están al servicio del saqueo de los recursos naturales y servicios públicos básicos como la educación y la salud, que se entregan a los capitales nacionales y extranjeros, y en la máxima expresión de entreguismo se crearon las llamadas ciudades modelo y la “hipoteca” de los posibles futuros ingresos del país. Se incrementó la explotación de los trabajadores mediante el congelamiento salarial, el empleo por hora y la pérdida de conquistas laborales, llegando al extremo del no pago a los empleados públicos, mecanismos que han profundizado el desempleo, la miseria y la falta de oportunidades fomentando la masiva migración tras el “sueño americano” y la inseguridad general con el incremento de la delincuencia en todas sus formas convirtiéndonos en un país con el más alto índice de homicidios y femicidios.

5. En este contexto general que nada tiene de democrático ni representativo, se impulsan las elecciones de noviembre de este año que tienen como objetivo legitimar la imposición del régimen represivo, antidemocrático, entreguista y fraudulento. Estas elecciones estarán, al igual que las del 2009 y las primarias del 2012, caracterizadas por el fraude y la negociación entre los dueños de los partidos, desconociendo la voluntad popular. Pero además, estarán condicionadas por los numerosos “pactos” que se están firmando –entre ellos el compromiso de reconocer y respetar el resultado electoral (sin garantías de transparencia) – que hacen que todas las candidaturas queden amarradas a los “pactos” con muy poco margen para propuestas diferentes.

6.La Candidatura Independiente Popular consideró en su momento que lo que ocurría en el país era suficiente para retirarse del proceso electoral del 29 de noviembre de 2009, por considerarloilegítimo, espurio y con un fuerte olor a fraude por parte del régimen de facto. Hoy todas esas razones se han multiplicado por mil.

7. Ante el panorama anterior, y más allá de las ilusiones en un cambio a través de este proceso electoral, la verdad es que nada cambiará y solamente se puede esperar del Gobierno de cualquier Partido que resultare ganador, la profundización de las medidas económicas neoliberales, la corrupción gubernamental, y las políticas que profundizan la miseria y la inseguridad para los trabajadores y el pueblo en general, y la plena vigencia de la impunidad jurídica de los delincuentes de toda categoría.

8. La participación de los trabajadores en el presente proceso electoral tendrá el efecto de elegir bajo las reglas de la institucionalidad burguesa, a las autoridades que ni serán sus legítimos representantes y que ante el descalabro institucional, solamente se espera en un futuro inmediato la desilusión de la población hondureña, ante un gobierno que no podrá ni pretenderá resolver los problemas fundamentales de los Trabajadores y el Pueblo hondureño.

Por todo lo anterior proponemos a la clase obrera y los trabajadores en general, lo siguente:

1. Es imprescindible para la Clase Obrera y el resto de clases oprimidas del país obtener las mejores lecciones producto de la experiencia electoral de la Candidatura Independiente y Popular (CIP) para avanzar en la Construcción de una Alternativa Política Revolucionaria que rescate la independencia de Clase perdida en apoyo de candidaturas y partidos burgueses y pequeño burgueses.

2. Este Instrumento Político de los Trabajadores debe surgir de las entrañas de los mismos trabajadores quienes deben darse su propia Dirección Política Revolucionaria que unifique las luchas en defensa de sus más genuinos intereses, contra los sectores dominantes: la Burguesía Financiera , Empresarial y Terrateniente de Honduras, así como las Instituciones Multinacionales y Consorcios Extranjeros.

3. La profundidad de la crisis económica, social y política por la que atraviesa nuestro pueblo y que se expresa en altos índices de pobreza y miseria, en intolerables condiciones de desempleo, salud, vivienda y educación, provocadas por el poder oligárquico e imperialista en el país, no tiene salida real y definitiva en los marcos del capitalismo patriarcal hondureño ni en los atajos de la corrupta vía electoral burguesa, avalada por la embajada yanqui, al margen de la lucha popular organizada por la defensa de la soberanía y las conquistas y derechos de los trabajadores y las trabajadoras hondureñas.

¡Por una salida anticapitalista a la crisis económica, política y social en Honduras!
¡Por un plan de lucha por la defensa de la soberanía ante la voracidad del capital transnacional en Honduras!
¡Por nuestra segunda y definitiva independencia política y económica!
¡CONSTRUYAMOS LA ALTERNATIVA POLÍTICA REVOLUCIONARIA DE LOS TRABAJADORES Y PUEBLO HONDUREÑO!

Tegucigalpa, 15 de Septiembre de 2013

IZQUIERDA REVOLUCIONARIA

Socialismo o Barbarie (SoB)

Unión Revolucionaria del Pueblo (URP)

Círculos Bolivarianos Morazanistas de Honduras (CBMH)

Bandera Socialista de Honduras (BSH)